La banda de rock quiteña se presentará este viernes 3 de julio en el Soul Autocine. En el primer concierto del año en el que el público podrá disfrutar en vivo de una banda desde sus autos. Pero eso no es todo: también estrenan canción. Hablamos con su vocalista.
El día que conocí a Jordan Naranjo (o Jordan Rock) su ruta del día era cruzar de polo a polo la ciudad de Quito. Esto era para vender personalmente las entradas del lanzamiento del último disco de su banda, 3Vol, de hace un año.
Pero la cruzaría en bici –estaba loco este man-.
Ese día comprendí que Jordan haría lo que sea por su banda. Y sí, este viernes 3 de julio (en plena pandemia) será una de las primeras bandas en tener una presentación presencial en vivo, pero en un autocine de Quito (los detalles al final de la nota) aprovechando que estrenan nueva canción.
Hablamos con Jordan un mes antes de este concierto (cuando no estaba confirmado), quien nos cuenta porqué la banda cambiará de a poco, las responsabilidades cargadas al hacer rock en Ecuador y de esa vez que un chapa les dio el check a su canciones.
Es una llamada por zoom, con un Jordan solo, en su nueva casa, -hice la mudanza en plena pandemia, pues loco, dos días antes de que decreten la huevada- dice, con ese acento bien quiteño que tiene, que siempre termina en risa. Sus únicos acompañantes en el cuarto son cuatro bajos que tiene enculados a la pared y peluches, de los cuales guarda a uno en especial al cual le llama Cococho, “lo tengo desde que nací, lo recogieron de la basura, lo cosieron y me lo dieron”, recuerda, mientras lo muestra en la llamada.
Es un acumulador.
-Yo no dormiría a lado suyo- le digo, basado en ese rostro demoníaco que presenta el juguete.
Jordan se ríe. La costumbre le ha quitado el miedo.
Como en 3Vol, con sus letras que más que poemas son puteadas.

La nueva canción que estrenarán se llama ‘Tronco’, un single muy diferente a la propuesta de la banda quiteña, “suavizando” un poco su estilo para hablar de otras cosas que atañen al mundo, como: el respeto a nuestro planeta.
Se estrenó en Radio La Metro, que para un músico que hace rock puede considerarse una graduación chiquita.
-De ley tú eras el man de 16 años que escuchaba full La Metro…todos los días- le digo.
-Claaaaro loco, de hecho si me emocioné full porque al Diego Tite le he escuchado desde chamazo, yo vistiéndome para ir al colegio era clásico escucharle. (Cuando se estrenó la canción) Me sentí un chamo escuchando 3Vol, que del putas mijo-
-¿Les ha pasado que con la banda reciben espaldarazos de festivales o medios?
-Si nos ha pasado. Lo que sentimos a veces es que piensan que vamos a destruir el lugar o que es muy pesada la música para ponernos en un cartel, o en algún programa, como en Epicentro…pedíamos full pero decían que no, porque la temática no iba, al final fuimos pero como que no sacaron todos nuestros videos…pero eso nos ha pasado, piensan que es muy pesada o rayada (la música), que no encaja en la temática de muchos bares o festivales, pero no creemos que ha sido una puerta cerrada es simplemente la decisión de variación de gente que quiere otra cosa en la música.
-¿Y los riesgos? ‘Chapa’ es una de las más escuchadas por cosas como sus puteadas…
-Todo ese disco del Vol3 es súper conceptual. Obedece a ese lado de decir todo, poder decir lo que nos dé la gana. Si creo que fue medio riesgoso, yo si lo pensé un chance. Cuando lo estaba escribiendo yo andaba enojado porque me había pasado algo medio turro con los chapas. Mi miedo era más mostrarles a la banda la canción (…) entonces no hubo tanto ese miedo de decir, más miedo me da cuando hay chapas, como que tal vez nos hacen algo, pero no ha pasado. De hecho, una vez unas chapitas ahí nos dijeron: “muy chévere, buena energía”, eso fue en Riobamba, en el 2019.

-¿Entonces concluyes que perdiste el miedo porque ahora van en grupo con la canción?
-Sí, más miedo da cuando vas a mostrarles la canción a la propia banda. Pocas veces pasa que hay composiciones enteras, ‘Chapa’ por ejemplo, cuando le mostré al Steven había una parte más foca y él me dijo que no “eso está muy denso”
-¿Qué decías en esa parte?
-Era algo como…me valen tres atados de no se qué…
-Ese álbum pegó justo en el contexto del paro, quizá se vio que son la banda que representaba a los jóvenes en esa coyuntura pero ahora los tiempos piden otras cosas…¿qué puedes concluir con ‘Tronco’?
-De hecho, es un cague porque cuando lanzamos el disco todavía no había la coyuntura del paro…justo lanzamos y pasó el paro. Son temas que tocamos desde el 2016, así que en realidad fue una coincidencia con lo del paro (…) nosotros tenemos canciones bastardas, que no tienen disco, está ‘Allula Espacial’ que hablaba sobre el fin del mundo y a partir de esa canción empezamos a componer y escribir cosas respecto a la consciencia…tenemos un tema llamado ‘Mundo’ que nadie lo ha escuchado que habla de que el humano es un cáncer para la tierra…y se formó esta canción ‘Tronco’, que se venía componiendo desde el año anterior. Cuando llegó el Zak la terminamos de componer, entonces no había nada o no sabíamos a que le estábamos cantando, era así de natural, era la evolución de la banda en cuestión de temáticas. A ‘Tronco’ la grabamos en enero con Nacho Molino, aprovechando que estaba dando una masterclass acá y la lanzamos en plena pandemia y es como que casi mágicamente encaja con las cosas de ahora.
-¿Visionarios totalmente entonces?
-Ajá, en Vol3 no nos habíamos dedicado a hablar de algo contestario o así de directo, era algo más volado y en doble sentido (…) fue casualidad que haya pegado con lo del paro.

Jordan agrega que entre la evolución de la banda han decidido dejar los ponchos, que han sido desde el 2015 una de las grandes referencias de la banda para los fans, “creemos que es otra etapa” dice, que es “un buen momento para sufrir ese cambio y dejar estas cosas que básicamente son un trébol pasado”.
Jordan me cuenta que se crío con la música “súper cabreada”, con el under del sur. A veces cree que también se cansó de eso, “porque conceptualmente eran casi lo mismo, todas (las bandas) estaban emputadas con los chapas y el sistema, ahí dije ‘qué raro’, hay que hablar de otras cosas también”.
-Tu banda hace algo parecido en cuanto a putear, ¿te cansaste de ella?
-De 3Vol no, nada, tal vez los ponchos un poco, de hecho los tengo adornando mi casa. Pero más bien no me gustaba mucho el concepto, pero ahora todo es un cambio de era. Sentimos un ‘peque’ de responsabilidad de darle un concepto a la gente.
Agrega que entre todos sus discos, los de la era universitaria representan mejor como ellos describen a la vida, porque les tocó vivirla en carne propia. “Estar en la U es una burbuja, se nos reventó esa huevada y salió el Vol3”, menciona Naranjo, quien acepta que no piensan tanto lo que van a decir, “que es natural que salga” dice. Sobre el último disco resume que las intenciones no son volver a hablar sobre lo dicho ahí, “para qué más” deja en claro.
-‘Tronco’ me da ciertos aires de algo más bailable y a la vez latino…
-En ‘Trono’ lo latino lo estamos jugando con la armonía, nunca hemos hecho tanto en 3Vol de jugar con la armonía. Nosotros usamos siempre más riffs, cosas más pesadas o acordes más simples. ‘Tronco’ toma recursos armónicos más complejos, está lleno de acordes y eso hace suene mucho más bailable, pero es súper raro encontrarle una relación con algo latino porque está en una métrica de 5/8 que es básicamente lo que hemos hecho desde el día uno: usar métricas raras y cambios igual de raros. La canción está en 5/4 y eso es lo que hace que no suene tan latino, que quiebre algo y sea hasta difícil de cantarlo (…) las melodías tratamos de enfocarnos un montón en cosas como Los Panchos o El Trío Colonial, que pasaba en canciones de Vol 3, que cuando las grabábamos pensábamos “¿qué harían los Panchos?”
-¿Crees que se suavizaron un poco con ‘Tronco’?
-Sí, ¿no? Ajá, claro, full. Pero es rayadaza igual. Eso es lo que no sé, porque la gente igual se va a pegar. Ya la tocamos en vivo una vez…igual se pegaron. Ya no sé que creer tampoco. No hay gritos pero es fuerte. El bajo es súper podrido, hay distorsiones, sí hay pobredumbre pero no es pesado.

Que si se suaviza “por algo debe ser” y si se vuelve pesado “focazo también” explica el músico quiteño que no descarta la idea que en algún punto hasta puedan hacer un disco acústico o electrónico pero, según Jordan, “siempre con un tinte rockero”.
Este jueves 2 de julio estrenan en todas las plataformas ‘Tronco’, que para el siguiente día será una de las razones para ir a verlos en su concierto en el Soul Autocine en Quito, en la Av. La Pradera junto a otra banda quiteña: Nuevo Bravo. Según el sitio Buenplan las entradas están agotadas. Sobre esta presentación, el Jordan de hace un mes se mostraba con miedo y alegría. “Estamos nerviosos, porque vamos a ser la primera banda, cualquier jalada va a ser conejillos de indias”, explicaba, entrando en emoción cuando me contaba que esto “va a ser el futuro”, donde estrenarán la nueva imagen de la banda que sí, dejará de lado los ponchos.
Escucha acá abajo a 3Vol.